En la tarde del pasado Sábado día 16 de febrero de 2013 en la Capilla de la Cofradía, se quiso proclamar y rubricar formalmente una amistad que une desde hace mucho tiempo a ambas formaciones musicales. Simplemente se quiso manifestar, con la misma naturalidad que une en el día a día, la fantástica relación que hay entre dos grupos de amigos que comparten una pasión musical y cofrade que ha llevado a establecer una amistad personal de la que se sienten orgullosos mutuamente.
Pero más allá de la amistad, un hermanamiento implica un estrechamiento de vínculos a la hora de promover actividades o colaborar recíprocamente en los intereses de ambas partes, especialmente en un plano muy importante, el solidario. Precisamente los “hermanamientos” como tal, nacieron como idea institucional tras la segunda guerra mundial para fomentar la colaboración y la solidaridad entre ciudades y naciones.
Además, por otro lado, los hermanamientos se ampliaron posteriormente como pacto oficial entre comunidades para establecer nexos culturales, y como reflejo de todo ello la Real Academia de la Lengua define la palabra “hermanamiento” como la acción de establecer lazos fraternales entre instituciones y la cooperación entre las mismas.
Pues bien, eso es precisamente lo que vienen haciendo en la práctica desde hace mucho tiempo estas dos bandas, los Nazarenos y la Buena Muerte, y a partir de hoy no será sólo un hecho sino un pacto que quedará puesto por escrito.
Además, musicalmente, vienen compartiendo estilos musicales y su particular manera de entender esta afición que tienen de rezar tocando un instrumento, y en particular, desde hace algún tiempo, el director de la Buena Muerte, Jose Angel Cardeñoso, asesora técnicamente a la dirección de los Nazarenos.
Pero esas colaboraciones entre bandas no serían suficientes para realizar un hermanamiento sin el vínculo más importante de todos, el de la amistad.
En el concierto, del pasado sábado, se hizo entrega de la partitura original de «Amargura Nazarena», primera marcha propia de la banda de los Nazarenos. Es una composición de dos grandes amigos de la banda y a partir del sábado hermanos, José Ángel Cardeñoso Llamas y Daniel Yubero Recio, ambos miembros de la banda de la Buena Muerte, por el XXXV aniversario de la banda de los nazarenos.
Esta marcha, “Amargura Nazarena”, ha sido recibida con gran cariño por todos los miembros de la banda por el año especial que es (este año se cumple el XXXV Aniversario de la formación de los nazarenos).
En el estreno de dicha marcha, ambos compositores, José Ángel Cardeñoso y a Daniel Yubero acompañaron a la banda de «los nazarenos», en el estreno de SU marcha, de la marcha de los nazarenos, «AMARGURA NAZARENA«.